“Estábamos esperando la reglamentación para la reapertura y los protocolos. Para nosotros es muy importante que los chicos puedan volver de a poco a los Centros”, aseguró el secretario de Desarrollo e Innovación Social Lucas Marino Aguirre.
El funcionario explicó que desde el inicio de la pandemia en los CDC se elaboraron viandas para entregar a las familias.
En relación al inicio de esta presencialidad segura en los Centros, la subsecretaria de Educación Marcela Demilta indicó: “Para abrir, tuvimos en cuenta el protocolo del Plan Jurisdiccional de la Provincia de Buenos Aires, que es el regreso a la presencialidad en las escuelas, en ese marco de la educación formal volvimos”.
En ese sentido, destacó que “para la reapertura de los Centros también se contempló el protocolo de Salud municipal. Se armaron burbujas o subgrupos con los niños inscriptos en cada uno de los Centros, respetando el tamaño que tiene la institución. En base a los metros cuadrados se determinó 1,5mts entre niño y niño y 2mts entre los niños y el docente”. Además celebró y ponderó “la labor y el compromiso de todo este tiempo tan complejo del equipo de trabajo de la Subsecretaría que dirige”.
En cuanto a la asistencia alimentaria que se brinda en estas instituciones de educación no formal municipales, manifestó: “La diferencia con las escuelas es que en los Centros vamos a brindar el almuerzo. Los niños que asisten al turno mañana reciben un desayuno, luego inician las tareas pedagógico-didácticas, que forman parte del segundo eje que tienen los Centros, a continuación se sirve el almuerzo, respetando el distanciamiento. Y en el turno tarde es al revés, los niños que salen del turno mañana del establecimiento educativo vienen a almorzar, hacen la actividad pedagógico-didáctica, meriendan y se retiran a sus domicilios”.
Cabe destacar que los niños que no están asistiendo a los CDC continúan recibiendo la vianda diaria.
