La reunión, mantenida entre los vecinos, el juez de faltas de La Plata, Gabriel Di Bella y el titular de Control Urbano, Ignacio Martínez, tuvo por fin poder exponer el grave problema que tienen quienes viven en las calles linderas al predio ubicado en Avenida Arana entre 140 y 140 bis, el cual se alquila diariamente para eventos privados. “Realmente se nos hace imposible dormir, porque no solo lo alquilan de día, sino que realizan mega eventos nocturnos, con música a todo volumen, lo cual altera a todo el barrio”, explicó Patricio, un vecino que concurrió a la reunión. De acuerdo a lo indicado por los vecinos a las autoridades municipales, el lugar pertenece al ex futbolista de Gimnasia y Esgrima de La Plata, Pablo "Moncho" Fernández, quien hace ya dos años decidió comenzar a alquilar su quinta, incumpliendo con las ordenanzas vigentes, ya que en dicha zona no se pueden desarrollar este tipo de actividades comerciales. A su vez, los vecinos recordaron que meses atrás también tuvieron un serio inconveniente con el titular del terreno, ya que había alquilado el predio para instalar una antena de telefonía celular, sin la debida autorización. En dicha oportunidad, el municipio prosiguió a clausurar y desmantelar el artefacto, que había intentado ser tapado, simulando ser un tanque de agua, pero que rápidamente fue reconocido como una antena por personas de calle de Control Urbano. Este nuevo inconveniente con “Moncho” Fernández, alteró el humor de los vecinos, quienes comentaron que “las fiestas casi siempre duran hasta las 6 de la mañana, y en muchas oportunidades, se han producido incidentes entre grupos de jóvenes, ya que salen en estado de ebriedad y se pelean en la calle”. Al salir de la reunión, Patricio explicó que “el lugar ya fue clausurado cerca de diez veces, y por eso los vecinos estamos pidiendo en este caso, que se aplique la clausura definitiva, ya que está claro que las inhabilitaciones momentáneas no hacen que esta persona cese en lo que está haciendo, ya que siempre espera a poder retirar la fala de clausura, para volver a alquilar el lugar”. Así mismo, resaltó que “tanto Martínez como Di Bella se mostraron muy comprensivos de lo que está pasando, y nos prometieron que la solución no iba a tardar en llegar, por eso realmente nos vamos conformes, y a la espera de que esto se resuelva”.