En un discurso en el que precisó a fondo la actual situación del territorio bonaerense, donde explayó estadísticamente los conflictos y la crisis que atraviesa los y las ciudadanos/as, Kicillof anunció que dará de baja el decreto de aumento de las tarifas de luz previstas para el 2020 y convocará a padres, docentes y cooperadoras para reparar escuelas antes del ciclo lectivo 2020.
Acompañado por quien también jurara como Vicegobernadora bonaerense, Verónica Magario, al momento de la jura, Kicillof fue acompañado por el Presidente de la Nación, Alberto Fernández; la Vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner; el Presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Sergio Massa, y por Eduardo “Wado” de Pedro, Ministro de Medioambiente, entre otras autoridades.
Luego de la jura, Kicillof inició su discurso y expresó: “Me vengo a comprometer ante los y las bonaerenses a trabajar con honestidad para reconstruir la provincia de Buenos aires, para recuperar los derechos perdidos”.
“Las elecciones de octubre que nos trajeron acá, para muchos fue inesperado y sorpresivo, pero lo hicimos con la mitad más dos de los votos, con una diferencia cercana a los 15 puntos”, señaló el nuevo gobernador, quien al mismo tiempo aclaró que “el significado de ese resultado es lo más importante que tenemos, porque es la expresión de la voluntad popular”.
Respecto a la combinación de los resultados que lo dieron como triunfador y la gestión saliente que encabezó María Eugenia Vidal, Kicillof dejó en claro que los “legisladores conocen muy bien el estado de situación, pero no fue un rechazo solo a la cuestión económica, sino a la lógica de gobierno, que nació con promesas pero que después se basó en el marketing político, explícitamente, pero se fue convirtiendo en una forma de negar los problemas”.
En tanto, Kicillof aseguró que “el pueblo de la provincia de buenos aires no quiere persecuciones, pero tampoco ausente, ni uno que no sana ni cuida”. “Hubo un intento cultural, con esta idea de que llegar a la universidad no es posible o tener un celular o una computadora son privilegios”, rememoró Kicillof.
Asimismo, el gobernador aseveró que “la unidad no significa pensar todos lo mismo, pero si metas que tiene que tener esta provincia”, dirigiéndose también a “los que nos pidieron un Estado que esté codo a codo y que le de la mano a los y las bonaerenses”.
Sobre las muchas problemáticas que atraviesa la provincia, Kicillof analizó que “son tiempos de inestabilidad financiera y económica, es un tiempo amenazante, pero hay que valorar que la sociedad y el pueblo aprendió sus lecciones históricas y nos trajo aquí de manera pacífica y democrática”.
Con relación a este nuevo período que inicia, Kicillof expresó que “se abre una etapa nueva que tenemos que construir, yo pienso estar a la altura, pero quiero decir que no pretendo ser gobernador de un sector político ni espacio, sino de todos los bonaerenses”. “Yo no creo que estén dejando un vara muy alta, sí un desempleo, una inflación, una deuda muy altas y las condiciones económicas muy bajas”, aseguró. Y añadió: “La transición ha sido muy correcta, y la información que nos dieron, será pública.”
“Este programa económico suele perjudicar algunos y beneficiar a otros, hay sectores que se han enriquecido muchísimo, y sus víctimas, siempre que se aplicaron estos planes económicos, afecta particularmente a la provincia de buenos aires y hemos observados, que hubo algunos instrumentos, que no protegieron a sus productores ni empresas”, esbozó Kicillof.
En tanto que explayó: “Dijeron que dejaban una caja de 25 millones de pesos, pero tendremos que ver con cuanto dejan la caja, si para las obligaciones que nos dejan alcanza con ese dinero, los sueldos, deudas, y en los próximos días tendremos que pagar 35 mil millones de pesos, y estimamos que deben 50 mil millones de pesos a proveedores.”
“En los últimos meses se frenaron los pagos, y hubo causas atribuibles a la política nacional”, aseguró el gobernador, quien también calificó como un “error el consenso fiscal, porque restringe los recursos propios, la provincia perdió autonomía fiscal, depende de más de recursos externos que nacional, se le prometió una actualización del fondo del conurbano que nunca pasó, pero además le trasladaron los costos de los subsidios”.
“Tenemos una emergencia financiera, la deuda pasó 9 millones de dólares, a 11 millones de dólares, pero esta provincia no produce en dólares”, alertó Kicillof, recordando a su vez que “cuando asumió el gobierno (por Cambiemos) tenía que afrontar compromisos en dólares por 5 mil millones, ahora es 8.800 millones.”
Sobre la Pobreza
Otro de los temas en los que profundizó el nuevo conductor de la Provincia bonaerense, fue la pobreza. En este sentido, Kicillof precisó que “el 63% de los niños bonaerenses son pobres“, y que “en la provincia de buenos aires en cuatros años cerraron 330 pymes industriales, 9.500 comercios, que no son solo números, sino personas, gente de carne y hueso, no simples números”.
“Vamos a encarar cada uno de los problemas de esta provincia de buenos aires y pretendemos desde el primer día, empezar por los que menos tienen, este gobierno se declara en lucha contra el hambre”, dijo con firmeza, Axel Kicillof.
Las tarifas
Además, se refirió a las tarifas y expresó que “si una tarifa no puede ser pagada por un jubilado es saqueo. La regulación de estado se las entregaron en bandeja a las empresas”. “Hay que defender la educación pública, a la universidad pública, a la ciencia, a los maestros cuando reclaman las infraestructura básica, y quiero hacer una homenaje a Sandra y Rubén (los docentes fallecidos en una escuela de Moreno)”.
Además, el gobernador remarcó que “el aumento de la luz lo dejaremos sin efecto”, y afirmó su deseo de convocar “a las empresas del sector para trabajar juntos en un esquema razonable y justo para que todos lo puedan pagar”.
“Le pedimos al gobierno nacional, que retroceda y deje sin efecto la creación del ente regulatorio de servicios públicos que se creó entre la provincia y la ciudad autónoma de buenos aires”.
Sobre las cáceles
En este sentido, Kicillof aseguró que “tenemos cárcel con 24 mil plazas y una población notoria, y la cifra son 49 mil presos hoy, eso genera la sobrepoblación penitenciaria, jamás registrada en la provincia de buenos aires.”
“La provisión de comida en las cárceles es de 400 millones de pesos y es la deuda a los proveedores, y hay que darse un trabajo para resolver las cuestiones estructurales”, argumentó el gobernador, quien remarcó que si bien “muchos problemas ya venían de arrastre”, luego se “agravaron”.
La cuestión presupuestaria
“El presupuesto es ficción, la provincia va a esperar a que se presente un proyecto de presupuesto nacional para presentar el nuestro”, expresó Kicillof, quien además destacó que “estamos lanzando un plan de emergencia para las productores”.
